Esos dos de la foto no son dos ex-presidiarios con traje de marca. Son Sean Parker y Shawn Fanning, que presentaban de esa guisa su nuevo servicio web, llamado Airtime. La propuesta es sorprendentemente poco original, porque Airtime no es más que un refrito de Chatroulette, aquel servicio que fue el fenómeno mediático de 2009 en Internet y que duró básicamente los dos telediarios que tenía que durar.

En BusinessWeek -de donde sale la foto que ilustra este post- le hacen demasiada publicidad a un servicio al que no le veo ni pies ni cabeza: Chatroulette ya demostró que lo de videochatear con gente que no conoces puede ser divertido unos 5 minutos. Aquello desembocó en una galería pitográfica que hizo que el servicio -inexplicablemente, aún activo- perdiera todo su interés, y veo bastante complicado que la idea de reflotarlo pueda tener sentido. Ni siquiera el apoyo total de dos de los enfants terribles del mundillo de Internet.

He de reconocer que ni siquiera he probado el servicio, que hace necesario el registro vía Facebook, pero a riesgo de parecer algo prepotente, hay cosas con tufillo a fracaso antes si quiera de empezar. Zuckerberg debe pensar lo mismo, porque no parecía muy emocionado por el servicio, que sí probó, y también lo piensa la gente de Imo.im, un servicio del que hablaban en VentureBeat y cuyos responsables hacían una declaración bastante inteligente:

€œOur goal is not to connect you to random people €“ I don€™t think that has worked in the past.€ Instead, CEO Ralph Harik said in an interview with VentureBeat that the problem of social discovery is finding relevant people. €What we really want to do is connect you to people who might have an impact in your life.€

No sé si en Imo.im tendrán éxito, pero al menos su objetivo parece mucho más razonable. El de Airtime, no. Lo que no acabo de entender es cómo estos dos avispillas han apostado por una idea que parece totalmente absurda. Igual me equivoco. Y eso, claro está, demostraría porqué ellos son unos avispillas y yo estoy como estoy 😛